Posiblemente una de las escenas cinematográficas más famosas en la protagonizada por Kim Basiger y Mickey Rourke en la película Nueve semanas y media (1986), en la que una de las prácticas en sus apasionados encuentros sexuales consiste en colocarse frente a la nevera y él ir dándole de comer una serie de alimentos de la forma más sensual, mientras ella permanece con los ojos cerrados. Acaban jugando con la comida y embadurnándose en ella. Esta practica tiene el nombre de “sitofilia” y está considerada como uno de los fetiches sexuales más practicados y sugerentes que existen, debido a su alto componente erótico. No siempre conlleva el terminar con el acto sexual, pero el hecho de embadurnar, rozar o lamer produce una gran excitación a quienes lo realizan.