En el 2011 las estanterías de muchas librerías se llenaban de ejemplares de una nueva novela que parecía estar llamada a ser uno más de los muchísimos libros sobre literatura erótica que anualmente se publican. Un género literario que llevaba cerca. De una década en la que había caído en picado, tanto en la calidad de las obras publicadas como en el interés que suscitaba en los lectores. Pero “Cincuenta sombras de Grey”, de la escritora londinense E.L. James llegó a revolucionar el mercado de la literatura erótica, quitando la razón a los más agoreros quienes estaban equivocados y dicha novela se convirtió en un auténtico bombazo editorial que provocó que inmediatamente se publicara al año siguiente la continuación de aquella historia en dos libros más: Cincuenta sombras más oscuras y Cincuenta sombras liberadas, vendiendo esta trilogía más de 30 millones de ejemplares en medio planeta.